Consejos para que tu móvil sobreviva al verano

1.- Los smartphones son casi otra parte más de nuestro cuerpo y, por eso, no podemos resistirnos a llevárnoslos a la playa o a la montaña. La luz solar es muy dañina para estos terminales ya que, además de provocar daños en la pantalla, puede hacer que el móvil se recaliente y afecte al interior y a su funcionamiento normal.

2.- Proteger los teléfonos con una funda no es suficiente ya que, cuando los llevamos a la playa, los tocamos con restos de crema o aceite solar que pueden penetrar en el terminal y acabar deteriorándolo.

3.- Parece obvio pero seguro que muchos han tenido la mala suerte de ver cómo su móvil se les caía al agua en verano. Aunque ya existen terminales resistentes al agua, una gran mayoría de ellos no lo son por lo que es muy importante cuidarnos de que no nos suceda. Si ocurre, debemos desmontar el terminal y dejarlo secar. Si con esto sigue sin funcionar, es preciso llevarlo al servicio técnico.

4.- El calor y el frío extremo son igualmente perjudiciales para el terminal por lo que, si es inevitable someterlo a estas condiciones, lo mejor es hacerlo totalmente cubierto con una funda.

5.- El polvo y la arena no son buenos aliados de los móviles. Además de rallar la pantalla y el exterior, pueden penetrar en el terminal y dañar sus mecanismos internos.

6.- La batería es uno de los elementos más preciados de los smartphones. Cuidarla desde que estrenamos el móvil para que nos dure lo máximo posible es fundamental. Lo más recomendable es que las tres primeras cargas las hagamos  con la batería completamente vacía y no dejar el cargador conectado una vez recargada la batería del smartphone.

7.- Es muy habitual que los móviles lleven funda. Pero, más allá del sentido puramente estético, debemos comprar una funda que cubra la pantalla, los laterales y las esquinas de forma que esté cubierto si se nos car al suelo.

8.- El smartphone nos permite acceder a nuestras redes sociales, correo electrónico, cuenta bancaria… algo que es un completo peligro en caso de pérdida o sustracción del teléfono. Por eso, es más que recomendable descargarse y activar alguna de las aplicaciones existentes para localización y control remoto de smartphones. En la mayoría de casos, permite la localización de terminal en todo momento y borrar los datos o app contenidas en él.

9.- El uso de un código PIN o de un patrón de bloqueo evitará que alguien pueda usarlo aunque esté encendido. También es importante tener localizable el IMEI, que es el DNI del teléfono que permite bloquearlo a distancia.

10.-  Realizar una copia de seguridad de los datos será muy de agradecer en caso de perder el terminal. Android lo hace con Google y iPhone con eCloud.